La odisea de un adolescente que se perdió en la selva tailandesa: sobrevivió comiendo hormigas y cortezas

Lawrence Stallard Honour, un joven británico de 19 años, fue encontrado tras haber estado perdido más de diez días en la jungla de Kanchanaburi, al oeste de Tailandia.

Su desaparición había encendido las alarmas y motivado un intenso operativo de búsqueda en la zona fronteriza con Myanmar, donde se temía por su seguridad.

El coronel de policía tailandesa, Santi Phithaksakul,, explicó que el adolescente había salido de su hotel en Kanchanaburi con la intención de llegar a Pavitujual, en el estado de Karen.

Tenía previsto cruzar el paso fronterizo de las Tres Pagodas el 27 de septiembre, pero al llegar descubrió que el puesto de control ya estaba cerrado, por lo que decidió continuar el camino por su cuenta.

Más tarde, intentó registrarse en un resort cercano, pero no pudo hacerlo porque no contaba con dinero suficiente para pagar la habitación. Lawrence salió del hotel con su teléfono cargado, pero lo perdió poco después de internarse en la jungla.

Mientras él estaba incomunicado, las autoridades iniciaron un operativo de búsqueda luego de que su madre presentó la denuncia en la comisaría de Pattaya, donde señaló que había revisado su correo electrónico y detectado movimientos preocupantes en la provincia de Kanchanaburi.

“Me temo que haya hablado con gente en línea y que lo hayan engañado para que vaya a uno de estos centros de estafas en Myanmar, donde no dejan salir a nadie”, declaró su madre, Gulnara Fattakhova, durante una entrevista con The Mirror.

Para intentar dar con su paradero, la policía difundió fotos del joven junto con imágenes de las cámaras de seguridad que lo mostraban la última vez que salió del hotel. Además, recorrían la ciudad para preguntarle a los residentes si habían visto al joven.

Durante su travesía, sin celular ni dinero, Lawrence se internó en un bosque después del anochecer y se perdió. Solo y desorientado, deambuló por terrenos accidentados.

Según relató a la policía, durante los días que estuvo perdido en la jungla logró sobrevivir alimentándose de insectos, como hormigas, y corteza de árboles, mientras buscaba mantenerse con vida.

Finalmente, tras más de diez días de soledad en la jungla, el joven logró regresar por sus propios medios al templo Wat Tham Kaew Sawan Bandan, donde fue rescatado por la Fundación One Sky el pasado 11 de octubre.

Las autoridades confirmaron que no había señales de abuso ni de tráfico de personas, y destacaron su capacidad de supervivencia.

La familia de Lawrence expresó su alivio y gratitud por su aparición. “Estamos agradecidos de que haya aparecido sano y salvo. Fue un susto enorme para todos”, señaló su madre.

Su madre lo definió como un joven tímido y tranquilo, pero con una habilidad especial para las computadoras.

Lawrence ya se encuentra con sus padres, quienes viajaron a Tailandia para reunirse con él tras su rescate. Mientras tanto, las autoridades tailandesas continúan investigando los detalles del viaje y asegurando que Lawrence reciba la atención médica y psicológica necesaria tras esta experiencia traumática.